lunes, 9 de mayo de 2011

DILE

Dile, si le ves
que no sufra.
Que sigo viviendo,
que sigo respirando.

Dile, si le ves
que ya no anhelo,
que ya duermo,
que ya no espero.

Dile, si le ves
que en mi soledad
entendí
la inmensidad del mar,
 conocí
el vacío de la noche y
sentí
el frío en mi piel.

Dile, si le ves
que su huída
ya la entendí
fué fácil acostumbrarse
a mí.

Dile, si le ves
que él sabía que yo soy como el mar,
siempre en movimiento,
con remansos de paz,
que habia que encontrar.

Dile, si le ves
que ahora comprendo,
porqué no quiso profundizar.

Dile, si le ves
que desista,
que amarre su barco
pues ahora,
bravas son mis aguas
pues tormentas provocó y
mi ira,
como arrecifes esparcí.

Dile, si le ves
que avanzo
con rumbo fijo,
que ya no lo necesito,
que sigo viviendo,
que sigo respirando.

Si le ves... dile.

              Lola P. Robles
                           Mayo-011

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