METÁFORA?

A puerta gayola espera,
una vez el primer capotazo,
como si de un saludo se tratara,
espacio y a por él.

Ha que llamar su atención,
que fije su interés.
Se le vuelve a citar,
capotes de registro, de exploración,
de tanteo.
Que gusta más, el temple, la calma,
o por el contrario,
la pasión, la bravura..
Cuatro pases,
suficientes pàra conocerse,
para medirse.
Ya todo está dispuesto.
La liturgia sigue.

Cambia el tercio.
Punzante cual puya,
en envites demuestra
que sus músculos
merecedores serán
de la faena que,
prometedora, se aproxima.
Su bravura esta demostrada
Unos cayados cargados de picardía y embaucamiento,
adornaran la fiesta que
a punto esta de comenzar.

Estoque en ristre,
muleta en mano,
con la mirada fija en él,
sin prisas, con suavidad,
hacia los medios hay que llevarlo,
donde las querencias y los miedos
no tienen cabida...
Y ya solos los dos,
mediran sus fuerzas,
en cada envite,
se acercaran más y más,
saldrán los instintos,
la nobleza, la casta.
Poco a poco,
un solo ser,
la unión, por la fusión.
La bestia será sometida,
estará a su merced,
su condición, su misión,
su legado,
todo a sus pies.

Y llega el momento de la verdad,
como si de un resorte se tratara,
en milésimas de segundo,
los sentidos se pararan,
el tiempo se detendrá
y todo parecerá flotar..
Se tantea con movimientos lentos,
acompasados,
para que la anatomía se coloque,
de tal forma,
que cuando su arma penetre,
haya el espacio justo,
para que de una sola
y certera estocada,
culmine la faena...
Y todo acabará,
los jadeos, la lucha, la entrega.
Con un solo estremecimiento,
un mirarse a los ojos,
todo habrá acabado.

Mirada al alvero del universo,
ovación..
Mente satisfecha,
cuerpo relajado.

                 Lola P. Robles
                                Nvbre-010